Este foco se enciende cuando la fotocelda deja de recibir luz.

Hablemos de las partes de una fotocelda. La ménsula es una pieza metálica esencial, así como el receptáculo.

El receptáculo tiene 3 cables: el cable negro, que representa la fase; el cable rojo, que va hacia la carga o al foco; y el cable blanco, que se conecta al neutro.

La fotocelda debe estar orientada hacia el norte, tal como estamos haciendo ahora.

Después de fijar la ménsula con un tornillo, conectamos el cable negro del receptáculo al cable negro de la fase proveniente del interruptor termo magnético.

El cable rojo se conecta al foco en el punto medio, conocido como retorno, y luego se une el cable blanco, que representa el neutro, al extremo del socket.

El cable rojo que proviene del socket se conecta al cable rojo del receptáculo de la fotocelda.

¿Qué sigue ahora?

Explicaremos a continuación que el cable blanco de la alimentación se conecta con el cable blanco del otro extremo.

Colocamos la fotocelda asegurándonos de que apunte hacia el norte para encender el foco cuando oscurezca. La posición es crucial y está indicada por la fotocelda. Presionamos y giramos la fotocelda en el receptáculo.

Luego, instalamos el foco y alimentamos el circuito para observar su funcionamiento con la fotocelda, especialmente útil en jardines o patios. Verificamos la fase con un probador tipo pluma que emite luz, mientras el neutro no debe mostrar señales de luz ni sonido.

El foco aprende de la fotocelda: se apaga debido a la luz del día y se enciende al anochecer. Simulemos la noche colocando un guante azul en la parte superior de la fotocelda.

Cuando oscurece, el foco se enciende automáticamente después de unos segundos, como pueden ver.

Normalmente, estos accesorios se usan en patios o jardines para encenderse por la noche y apagarse durante el día después de un tiempo específico. Cuando no hay luz, como ahora, el foco se apaga. Y cuando vuelva la luz después de unos segundos, se apagará nuevamente